El Moulin de la Galette es una bella institución que hay que redescubrir en Montmartre. Este lugar, reunión de dos molinos tradicionales, se transformó en guinguette en 1834, convirtiéndose en la guarida de todo Montmartre. Hoy, el Moulin de la Galette se renueva y ofrece una cocina moderna en un ambiente de bistró chic.