Le Rouge à Lèvres: el restaurante de tapas y vinoteca que invita a viajar en el distrito 9 de París

Una cálida bienvenida, sabrosas bebidas, deliciosos platos para compartir (o no) y una decoración cuidada y envolvente... ésta es la fórmula mágica de Rouge à Lèvres, este restaurante de tapas y vinoteca situado en el distrito 9 de París que nos ofrece una hermosa escapada exótica.

Si busca un lugar original con un ambiente diferente, diríjase al distrito 9 de París para descubrir Rouge à Lèvres. Nada más entrar, uno se siente de vacaciones con las luces tenues, el árbol del interior, las guirnaldas de luces y el bonito tocador florido. Hay que decir que el propietario, Serge Ahovey, se inspiró en sus numerosos viajes a Bali para crear un ambiente único, exótico y muy acogedor, al igual que el personal, que se encarga de atenderle desde el primer momento.

Una vez instalado, sólo hay que echar un vistazo a la tentadora carta, centrada en recetas asiáticas, pero no sólo. Algunos habituales de la zona se darán cuenta enseguida de que los platos son idénticos a los que se ofrecen en Vert Sauvage, situado justo al lado. Venga, siéntese, le contamos la historia. Ocho años después de abrir La Mangerie, su primer establecimiento en París, Serge se propuso un nuevo reto creando un segundo local con un toque más femenino. Le Rouge à Lèvres nació en la primavera de 2019. En vista del éxito y la popularidad del lugar, Serge decidió ir aún más lejos y crear una nueva y tercera dirección, Le Vert Sauvage, a pocos pasos de distancia. Los dos establecimientos comparten la misma cocina y la misma carta. Sin embargo, la decoración es diferente. Si se ve la vida de rojo, sólo podemos aconsejarle que vaya a Le Rouge à Lèvres, donde pudimos saborear deliciosos platos, cada uno tan tentador como el siguiente. ¿El plus? Una preciosa carta de vinos, ¡con un centenar de referencias!

Acompañados de buenas añadas de diferentes viñedos, los platos de Rouge à Lèvres están elaborados con cariño y gustarán a todos los paladares: a los amantes de los sabores asiáticos con, por ejemplo, raviolis de gambas fundentes, acelgas al sésamo y crema de maíz, o un sabroso gua bao de pollo con cacahuetes y cilantro. También nos encantó el huevo escalfado con pastrami a la plancha y cheddar madurado, así como el tataki de ternera con zanahorias cremosas y pak choi.

Los amantes de los embutidos y los quesos estarán más interesados en el jamón blanco con trufa y la burrata cremosa con avellanas y nueces a la plancha. ¿También en el menú? Arroz jazmín tailandés ecológico, una sopa de calabaza o una fina tarta de quinoa. En total, una quincena de tapas para tentarse. Lo difícil será elegir.

Y para los más golosos, la mousse de chocolate, el financier de almendra y las galletas se baten en duelo. Por último, el tiramisú -con frutos rojos, por supuesto- ¡nos habrá seducido!

Prueba de su fama, el Rouge à Lèvres tiene ahora un hermano pequeño. Situado en el corazón del pueblo borgoñón de Beaune, este establecimiento también ofrece tapas, así como más de 100 referencias de vinos, cuya selección ha sido confiada a Raphaël Pusset, comerciante de vinos de la región.