Si hay un chef que está impaciente por volver a los fogones, ese es Arnaud Donckele, que espera con impaciencia la apertura del Cheval Blanc París y de su restaurante gastronómico Plénitude, prevista para el 7 de septiembre de 2021. Desde hace más de dos años, el chef galardonado con una estrella Michelin, que también trabajó en el Cheval Blanc Saint-Tropez, afina su carta y prepara la apertura de una de las mejores joyas de la capital, aplazada una y otra vez.
Situado en la primera planta del hotel 5*****, con una vista despejada del Sena "al alcance de la mano", Plénitude es un marco íntimo, ideal para una escapada atemporal. La decoración suave y luminosa, con sus toques de amarillo y naranja y sus cómodos asientos, insinúan el comienzo de una experiencia extraordinaria. Ya se sentirá como en una nube, lejos del bullicio de París y de las preocupaciones de la vida cotidiana.
Arnaud Donckele, ganador de tres estrellas MICHELIN y galardonado con un 19/20 por Gault et Millau, se instala en el Cheval Blanc Paris y ya tiene previsto ofrecer una cocina basada en productos frescos y de temporada, privilegiando, como de costumbre, los circuitos cortos y los proveedores locales.
Para completar la experiencia, el chef pastelero Maxime Frédéric, un joven prodigio de la repostería reconocido internacionalmente por sus postres aireados, propone terminar una comida deliciosa con una nota agradablemente dulce.
Nuestro veredicto:
¿Puede un establecimiento reclamar el título de mejor restaurante de París? Si es así, Plénitude es claramente un candidato de ensueño, ya que la experiencia nos ha conquistado.
Arnaud Donckele ha despertado el espíritu de la alta cocina, la que inventa, sorprende y fascina. Su trabajo sobre las salsas (se le invita a saborearlas por separado, antes de cada plato) marca la pauta, y le prepara para un viaje gustativo y emocional sin igual.
Plénitude es también un viaje para los sentidos. Desde la mesa del Chef, percibirá los aromas embriagadores que emanan de la cocina, donde escuchará a la brigada trabajando duro. Tocará la sublime madera maciza de la bodega, trabajada al milímetro para crear este emblemático pasillo a medida. Por último, la relajante decoración contrasta con el Sena y París, ofreciéndole un momento único de... plenitud.
Porque cada detalle es fruto de un trabajo de equipo en perfecta armonía, Plénitude es un homenaje indiscutible a la mejor cocina de París y de Francia.
