¿Echa de menos las vacaciones al sol? ¿Por qué no las encuentra en su plato en Figata, una charcutería italo-sarda del distrito 18 que ofrece toda una gama de productos directamente de este bello país bañado por el sol (casi todo el año, según donde vaya), así como bocadillos revisitados para el almuerzo y un aperitivo mediterráneo por la noche. Charlotte y Flora, dos hermanas gemelas franco-sardas, han creado una experiencia culinaria única.
¿Qué se puede encontrar en esta tienda de comestibles? Especialidades sardas, por supuesto, como el pane guttiau, un tipo de pan muy fino que se parece mucho a una crêpe, pero también mini alcaparras de Selargino de Marco Maxia, una selección de pecorinos de montaña (un queso de oveja cocido), así como más de 20 referencias de pasta -entre ellas la marca Cellino, que no se encuentra en ningún otro lugar de Francia- y una bodega de vinos y licores 100% sardos. Y, por supuesto, los grandes clásicos, como la mozzarella de búfala, el gorgonzola a cucharadas, las aceitunas taggiasche a cucharones o un poco de mortadela directamente de Bolonia.
Figata no es sólo para ir de compras... También es un lugar para comer. Al mediodía, Charlotte y Flora sirvenfocadwiches, bocadillos de pan de focaccia cuyas recetas son obra del genial Mattia, chef de La Riposte, en el distrito 9 de París. Y por la noche, ¡la horadel aperitivo! En cuanto a las bebidas, copas de vino e Ichnusa -una cerveza sarda- harán las delicias de los paladares más entendidos, y en el plato principal, pan crujiente, maturo de pecorino romano y otros pimientos rellenos harán viajar a sus papilas gustativas.
Un menú que pudimos probar... Nos tentó el plato del día, ñoquis con crema de pecorino y burrata, así como focadwiches con coppa. Estas dos creaciones caseras son tan sabrosas y deliciosas, ¡que te caerás de la silla! Los ñoquis son simplemente perfectos, y el focadwich es absolutamente divino. La relación calidad-precio también es muy buena. Un plato de ñoquis cuesta 9 € y dos focadwiches con patatas fritas, 10 €.
De postre, optamos por el tiramisú casero.... ¡Una auténtica delicia! Una propuesta aireada y ultra sabrosa para terminar la comida. ¿Y para acompañarlo? Chinoto (una especie de cola amarga italiana) y una Limonata, directamente del sur de Italia. Tenga en cuenta que la tienda de comestibles está bastante bien surtida (sucumbimos a los barquillos de avellana, potentes de sabor), y que en ocasiones también está disponible una sala privatizable para eventos, para una docena de personas.
En resumen, es un lugar estupendo al que es difícil dejar de ir, sobre todo si estás por la zona... Así que, amigos, ¿tenéis ganas de buena comida italiana?
Tarifas
Les desserts : €4
Les softs : €4.5
Le vin, au verre : €8
Les focadwichs : €8.5 - €11
Le plat du jour (principalement des lasagnes maison) : €9
Sitio web oficial
figataepicerie.fr
Más información
Abierto de martes a sábado, de 11.00 a 14.30 y de 16.00 a 20.00 h. Cerrado los días 24 y 31 de diciembre.























