Los mejillones con patatas fritas son un plato popular en las regiones costeras de Francia, ¡pero no sólo allí! También en París es difícil resistirse a este plato reconfortante , cuyos sabores ricos y yodados compensan el crujiente de las patatas fritas doradas. Sencillas pero sabrosas, las moules-frites están presentes en las cartas de los restaurantes y brasseries tradicionales de la capital.
Normalmente cocinados con hierbas aromáticas, ajo, cebolla y vino blanco, los mejillones se sirven a menudo con una salsa marinière -mantequilla, chalotas, perejil-, pero también, en recetas aún más gourmet, con una salsa de curry, una salsa de crème fraiche, una salsa de roquefort, o incluso con lardones para los más traviesos.
Consideradas un plato tradicional en Francia, pero también en Bélgica, las moules-frites se sirven mejor con una cerveza fría o un vasito de vino blanco, dentro de lo razonable, claro. Así que, para degustar un plato que huele a mar y a sol, aquí tiene nuestras mejores direcciones para comer sabrosas moules-frites en París.
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De día o de noche, la brasserie Au Pied de Cochon deleita a parisinos y turistas por igual con su cocina francesa tradicional y generosa. Una dirección legendaria que hay que probar al menos una vez en la vida. [Seguir leyendo]
L'Alsace, la legendaria brasserie de los Campos Elíseos
L'Alsace tiene su propia dirección en París, concretamente en los Campos Elíseos. Aunque la dirección existe desde 1968, en 2017 la brasserie recibió un lavado de cara a cargo de Laura González (¡nada menos!). Abierta todo el día, la brasserie ofrece quiches de Lorena, flammekueches, spätzle gratins y, por supuesto, el chucrut local, ¡imprescindible en invierno! [Seguir leyendo]
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